Existen enfermedades muy peligrosas que hemos intentado acabar desde su aparición, como el VIH.
El VIH o SIDA es una de las enfermedades más peligrosas y mortales del mundo e incluso probablemente de la historia, esta enfermedad ha cobrado la vida de millones y millones de personas, además.
La forma de su contagio es sumamente sencilla a diferencia de otras enfermedades contagiosas, la realidad es que desde hace muchos años se ha incentivado el uso de preservativos y otros aditamentos justamente para acabar con esta mortal enfermedades pero su propagación no ha tenido límite en lo más mínimo.
Lo que ha preocupado a muchos médicos ya que ha día de hoy no existe una cura efectiva que asegura la eliminación de esta enfermedad.
Aunque actualmente gracias a las amplias tecnologías y la ciencia, existen varios tratamientos que ayudan a disminuir de gran manera los síntomas y efectos que causa el VIH.
Lamentándolo mucho eso no es una cura ya que quedarías esclavizado de por vida a los medicamentos porque el día en que dejes de tomar alguno, sin duda el SIDA te lo hará saber.
Justamente por eso en muchas escuelas y otros sitios educativos se está incentivando el uso de preservativos porque actualmente existen al menos unas 33 millones de personas con VIH, sin embargo se ha hecho un descubrimiento increíble.
Se ha descubierto nada más y nada menos que la cura definitiva del VIH y por supuesto su respuesta vino en la naturaleza, vamos a conocer este increíble hallazgo.
La cura del VIH que viene de la naturaleza
Esta increíble cura viene de una Abeja, es correcto, viene del veneno de una Abeja, más específicamente una toxina llamada melitina la cual destruye el virus desde su nacimiento.
Este impresionante veneno puede ser usado como un poderoso anticuerpo que invade de raíz las células portadoras de VIH, no solo eso.
Sino que se crea un efecto rebote cuando actúa en alguna célula no poseedora del virus, sin duda un gran descubrimiento.
Te dejamos un video para que puedas aprender un poco más acerca de esta cura.
No solo trata al VIH, también a tumores y otras enfermedades celulares.
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